Activistas climáticos arrojaron este domingo sopa sobre el cuadro de la ‘Mona Lisa’ en el Museo del Louvre, exigiendo el derecho a una «alimentación sana y sostenible». Al mismo tiempo, afirmaban que «nuestro sistema agrícola está enfermo».
«¿Qué es más importante, el arte o el derecho a una alimentación sana y sostenible?», preguntaron dos mujeres que llevaron a cabo la acción de protesta de pie y frente al cuadro y hablando por turnos. «Su sistema agrícola está enfermo. Nuestros agricultores se mueren trabajando», proclamaron.
La famosa obra maestra de Leonardo da Vinci, pintada en el siglo XVI, está detrás de un robusto cristal antibalas, por lo que es poco probable que haya sufrido daños.
Francia, como otros países de la Unión Europea (UE), se ha visto sacudida este mes de enero por manifestaciones de granjeros a gran escala. En señal de protesta por las políticas del Gobierno de Emmanuel Macron y de la Unión Europea (UE) sobre el sector agrícola, los agricultores bloquean carreteras, hacen hogueras y dejan tripas, estiércol y otros desechos a las puertas de los locales comerciales y oficinas gubernamentales.
