Trump dejó claro que rescindirá las órdenes ejecutivas del presidente estadounidense, el demócrata Barack Obama, que impiden expulsar tanto a los jóvenes indocumentados que llegaron al país siendo niños (los llamados «dreamers», o «soñadores»), como a los padres de ciudadanos estadounidenses o hijos con estatus legal.
«Mantendremos a las familias unidas, pero tienen que irse», subrayó el magnate inmobiliario, en una entrevista grabada a bordo de su avión privado durante su visita este fin de semana a la Feria Estatal de Iowa, un multitudinario certamen en el que numerosos candidatos republicanos y demócratas han buscado apoyo electoral.
«Trabajaremos con ellos. Tienen que irse (…). O tenemos un país o no tenemos un país», insistió el millonario. «Tenemos -zanjó Trump- que crear nuevos estándares» para los inmigrantes que lleguen a Estados Unidos, donde se calcula que viven más de once millones de indocumentados.
«México debe pagar el muro», precisó el millonario republicano. Agencias