El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, informó este lunes que el derrame de combustible en las barcazas ubicadas en el puerto de Azua (suroeste) se debió a incumplimiento de las medidas de seguridad por la empresa que opera la planta.
El ministerio indicó en un comunicado que notificó al grupo Karpowership los resultados de la investigación técnica realizada al Proyecto Powership Azua.
El informe recomienda sanciones a la entidad por el vertido de lodo ocurrido el 31 de agosto pasado, mientras trasladaban desechos de combustible de la barcaza.
El Ministerio comunicó, además, que indicó a la Central de Generación Eléctrica Powership Azua detener el trasiego de restos de combustibles derivados del proceso de combustión y funcionamiento de los motores, hasta que se sustituya el sistema de mangueras, pues la rotura de la misma motivó el incidente.
Karadeniz Powership, encargada de las operaciones, es una empresa conjunta entre la turca Karpowership, líder mundial en centrales eléctricas flotantes, y el Grupo EGE Haina, una compañía de energía de la nación caribeña.
El representante en el país de esa entidad de capital turco, Carlos Matamoros, precisó la semana pasada en una misiva a Diario Libre que se ejecutan acciones adicionales en la planta, a la vez que efectúan simulacros y entrenamientos con el personal.
Acerca del lo ocurrido, puntualizó que durante una operación de transferencia de lodo (sustancia compuesta por 65 por ciento de agua y 35 por ciento de residuos generados en la industria petrolera), se detectó una fuga en la conexión del acoplamiento de la manguera, al poner en funcionamiento la bomba.
Explicó que los operadores detuvieron la bomba de inmediato y aislaron el escape, pero que aún así se derramaron unos 25 litros dentro de la barrera de contención que rodea la barcaza, filtrándose hacia la playa una cantidad mínima.
A partir de la notificación a la empresa, esta tiene cinco días para presentar cualquier alegato, según el comunicado.
