El exbeisbolista Miguel Tejada y su esposa enfrentan dos sentencias de embargos de igual número de viviendas en la ciudad de Baní, Peravia, por fallar en el pago de las hipotecas, según sentencias emitidas por un tribunal de esa provincia.
Una de las propiedades embargadas tiene una superficie de 292,50 metros cuadrados y está valorada en 87.730 dólares, mientras que la otra tiene 245,68 metros tasada por un valor de 35.585 dólares.
Las sentencias fueron emitidas por la Cámara Civil, Comercial y de Trabajo del Juzgado de Primera Instancia del Distrito Judicial de Peravia en fechas diferentes, en favor de José Antonio Guerrero Ortiz.
A raíz de estas decisiones judiciales, el fiscal de Peravia, Luis Armando Pimentel Rivera, emitió el 29 de marzo pasado dos notificaciones para que Tejada y su esposa Santa Alejandra Reyes Ruiz, o quienes estuvieren ocupando esas propiedades, las abandonen en un plazo de 10 días a partir de la fecha de esa notificación.
De acuerdo a fuentes consultadas por Efe que prefirieron el anonimato, en una de las viviendas reside el padre de la esposa de Tejada, mientras que en la otra lo hace un hermano de esta.
Esas fuentes aseguran Tejada reside actualmente en Santo Domingo, mientras que su esposa lo hace en Baní.
A principios de marzo pasado Tejada, Jugador Más Valioso de la Liga Americana en 2002, fue condenado a un año de prisión suspendida por presuntamente haber pagado cheques sin fondo a un empresario local.
La jueza Diana Moreno, de la Octava Sala Penal del Distrito Nacional, dispuso también que Tejada pague la deuda causante del litigio, 3,5 millones de pesos, además de otros 200.000 pesos en indemnización.
Para no ir a prisión, Tejada tendrá que tener un domicilio fijo, no consumir alcohol, no portar armas de fuego y asistir a charlas coordinadas por un juez.
Conforme con la sentencia, Tejada no cumplió con el acuerdo rubricado el 4 de diciembre del año pasado, cuando se comprometió a saldar la deuda.
El dominicano fue uno de los peloteros más dominantes en el pasado reciente de las Grandes Ligas, pero en 2009 fue encontrado culpable de perjurio y de mentirle al Congreso de los Estados Unidos, por lo que fue sentenciado a un año de libertad condicional.
