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    Luis Abinader y las rabietas de un ex-carajito malcriado

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    Humberto Salazar
    Humberto Salazar

    Por Humberto Salazar

    Si de números se trata, el béisbol es uno de los deportes que requiere mayor inversión económica para su practica, a los guantes de cuero importados, hay que sumarle los bates, que se astillan o se rompen, las pelotas y hasta la careta, pechera y rodillera que usan los receptores.

    Es parte del recuerdo popular las historias, de los niños de padres ricos, porque además este deporte necesita un mínimo de 18 jugadores, que eran dueños de guantes, pelotas y bates, solo que cuando estaban perdiendo el partido o algo les incomodaba, finalizaban el juego a la fuerza recogiendo y llevándose sus útiles.

    Parece que Luis Abinader, el pasado candidato a la presidencia de la República del PRM, era uno de estos «carajitos» hijos de papi y mami, a los que si no se les complacía, hacían una rabieta y desbarataban el juego o lo que sea, porque los resultados tenían que ser como los de Jalisco, que nunca pierde.

    Esto lo decimos, porque cual Júpiter tronante, en el día de ayer afirmó que en el país se acabaría la paz y la gobernabilidad, si a el, es decir a Abinader y su gente, no se les complacía convocando a un dialogo, para nosotros totalmente innecesario y a través de el se nombraba a los miembros de la Junta Central Electoral.

    Una de las cosas que los psicólogos les enseñan a los padres modernos, es a evitar darle todo lo que pidan a los hijos, porque argumentan, que cuando crezcan van a pensar que la sociedad tiene que complacerlos en todo y sino, entonces se rebelan en contra todo lo que los rodea porque creen merecer todo.

    Parece que uno de estos problemas es que padece el señor Abinader, porque no ha llegado a entender, que la política no es una empresa privada donde el puede mandar a sus anchas a sus empleados, que esta es una actividad pública donde no esta solo, al contrario, tiene reglas que están escritas y son inviolables.

    Porque ¿de dónde saca Abinader el criterio de que esta en sus manos atentar en contra de la paz pública, si no se le complace en convocar a un dialogo para violar el derecho exclusivo que tiene el Senado de la República para elegir a los miembros de un organismo administrativo del Estado dominicano?

    Mantener la paz pública en un país organizado, es una responsabilidad inherente a la existencia de la sociedad moderna y a los cuerpos armados y de inteligencia de que dispone un gobierno, es mas, es el Estado, el único que tiene la exclusividad constitucional del uso de la fuerza para mantener el orden y la paz publica, garantía de la convivencia pacífica.

    Para nada creemos que Abinader pueda estar pensando en atentar en contra de la tranquilidad de la familia dominicana, que quiere trabajar y progresar en paz, solo porque no fue capaz de ganar unas elecciones y ser presidente de la República, es mas, creemos que ni siquiera midió el alcance de sus palabras.

    Porque suponemos que sabe, que si existiera en la República Dominicana una situación de inestabilidad social, probablemente el y su familia serían de los que primero resultarían afectados, porque sus negocios de venta de títulos universitarios, en la denominada Universidad O&M, e inversiones en el área turística, resultarían severamente afectados.

    La otra amenaza del ex-carajito malcriado de Abinader, es que si no se le complace, habría en el país un estado de ingobernabilidad, palabra que suponemos el conoce su significado.

    Porque un Estado se convierte en ingobernable, cuando los actores a su interior, deciden desobedecer al orden establecido, es decir existe una decisión cívica de desobediencia, y si eso es lo que espera desatar sobre el país el señor Abinader, debería echar un ojo a lo que esta ocurriendo a lo interno de la República Dominicana.

    En este momento, el país tiene el presidente con mas alta valoración pública de todo el continente, según la encuesta Mitofsky publicada la semana pasada, la economía no solo esta estable, las expectativas de crecimiento están en un promedio del 7%, la inflación se encuentra por debajo de un dígito y las tasas de pobreza y desempleo disminuyen en forma acelerada.

    En un país con índices económicos y políticos como esos, no existe ninguna posibilidad concreta de que se produzca un ambiente de ingobernabilidad, y menos porque un grupo de políticos ambiciosos e irreflexivos, hayan decidido convertir el periodo post electoral en un largo camino de lamentos y quejas, solo porque no fueron favorecidos por el voto popular.

    No hay posibilidad ninguna, so pena de que el presidente Danilo Medina se arriesgue a violar la Constitución de la República, de sacar la discusión y designación de los miembros de la Junta Central Electoral, que no es un tribunal sino un organismo administrativo, de las paredes del congreso, y específicamente el Senado de la República.

    Los reclamos del señor Abinader y los miembros de los partidos que presionan para llevar esas designaciones a los salones de una universidad privada, y que la discusión la encabece Monseñor Agripino Nuñez, lo único que buscan es validar, a través de esas reuniones, la existencia de una crisis que solo existe en sus cabezas.

    Y en cuando al tema del Tribunal Superior Electoral, sus miembros, que si son parte de la judicatura, serán electos cuando se convoque el Consejo Nacional de la Magistratura, organismo colegiado donde hay representación de los tres poderes del Estado, y está encabezado por el presidente de la República.

    Así que solo hay que advertirle al señor Abinader, que ya el está un poco grandecito para hacer esas rabietas de niño malcriado, esta es la vida real y en ella se gana y se pierde cuando los seres humanos se arriesgan a competir, y en su caso, el perdió las elecciones, y no es verdad que desbaratará el juego armando un desorden como lo hacían los hijos de los ricos cuando perdían.

    Si es que el no se dio cuenta, en la misma pagina donde se publicó su advertencia de llamar al desorden social, se dan los resultados de una encuesta donde el 77% de los encuestados se opone a que el Presidente Danilo Medina intervenga en la selección de los miembros de la JCE, TSE y CC.

    Es decir señor Abinader, deje ya de estar apuntando con carabina vacía, que usted esta muy viejo para esos canes.