El exjuez del Consejo del Poder Judicial, Francisco Arias Valera, y la suspendida jueza Awilda Reyes Beltré se presentaron ayer por separado al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) y se negaron a prestar sus firmas alegando que sus respectivos abogados no estaban presentes.
La experticia caligráfica fue requeridas para poder determinar si habían sido ellos lo que estamparon sus firmas en un recibo de supuesto soborno.
Ante la negativa de los jueces, se levantó un acta de la presencia de ambos, luego se procedió a realizar el estudio con las muestras que se recabaron en el allanamiento en la residencia de Reyes Beltré y con los documentos ofrecidos por la Suprema Corte de Justicia que contienen la firma de Valera.
Se recuerda que la suspendida jueza Reyes Beltré fue incluida por la Procuraduría General en un grupo de cinco magistrados, incluyendo a Francisco Alberto Arias Valera, miembro del Consejo del Poder Judicial, que serían parte de una mafia que emitía sentencias por dinero o “por órdenes de superiores”.
