El Senado de Francia dio el visto bueno para legalizar el uso de aceites comestibles como combustible, informa Le Monde.
Si bien en julio el proyecto de ley propuesto por diputados ecologistas fue aprobado por la Asamblea Nacional en primera lectura, los senadores lo rechazaron. Actualmente, la posición del Senado francés sobre esta cuestión ha cambiado, ya que no se opone a la medida, sino que la limita a los parques automotores privados de empresas o comunidades.
«Cabe señalar que hoy las tasas de contaminación, de emisiones a la atmósfera, siguen siendo demasiado altas», indicó el relator general del presupuesto Jean-François Husson para justificar la limitación.
No obstante, este combustible alternativo «emite un 90 % menos de gases de efecto invernadero que el diesel convencional, emite muchas menos partículas finas y cuesta mucho menos que los combustibles fósiles», aseguran los partidarios de la iniciativa, según los medios.
Además, sostienen que de 10 litros de aceite usado y «adecuadamente filtrado», se pueden producir 8 litros de combustible.
La escasez de combustible ha estado causando disturbios en las calles y largas filas en las gasolineras durante más de un mes en varias regiones de Francia. Algunos conductores franceses incluso cruzaron la frontera para cargar gasolina en España.
