Por Humberto Salazar
«Y entró Jesús en el templo y echó fuera a todos los que compraban y vendían en el templo, y volcó las mesas de los cambistas y los asientos de los que vendían las palomas. Y les dijo: Escrito está: MI CASA SERA LLAMADA CASA DE ORACIÓN, pero vosotros la habéis convertido en CUEVA DE LADRONES«.
Bastante curiosidad nos provocó la mesa que montó el Gallero Tramposo del reformismo para conmemorar el 54 aniversario del Partido Reformista, fundado por Joaquín Balaguer, un 21 de julio del año 1963, quien en ese entonces vivía en el exilio, después de ser echado del poder y del país en el año 1962 por la oligarquía dominicana.
La mezcla era bastante peculiar, claro haciendo la salvedad de la ausencia total de los dirigentes históricos del hoy PRSC, que abjuran de la dirección que dicen mantener los que han convertido el local tradicional de la San Cristóbal de un espacio para discutir lo que debió ser la continuidad del partido demócrata cristiano del país en una «cueva de ladrones».
Y decimos que es interesante ver como marchantes verdes contra la impunidad, como el fenicio del Partido Revolucionario Moderno, «al final ellos se juntan», se une en una ¿celebración?, mas bien un velorio con el activista político más cuestionado del país en todos estos años por el manejo cuestionado que ha hecho de cada centavo que han puesto en sus manos.
Es decir, el que fuera candidato el PRM, que presume de ser toda una «montaña de moralidad», se sienta al lado de una persona que confesó públicamente, entre otras diabluras, de haberse repartido dinero que no le correspondía ni a el ni a sus allegados, mientras dirigía un banco estatal que hasta tuvo que cambiar las siglas porque si lo dejan no quedan ni los edificios.
Tampoco entendemos la insistencia, dicen que son familia, del menor de los Castillo en acompañar en un acto público a una persona que ha sido todo lo contrario a lo que ha predicado su familia, sobretodo su padre históricamente.
¿Cómo es posible que los que presumen de ser los más honrados del país, los que nunca en la vida han tocado un centavo del erario público para beneficio personal, se sienten en un lugar público con el que ellos saben ha vendido su ¨alma al diablo¨ a cambio de prebendas personales y beneficios económicos?-
Si existe un ejemplo de impunidad y muestra del relajo de lo que es la justicia en este país, es la permanencia de un individuo de la calaña del «Gallero Tramposo», quien está ¨natagueando¨ para quedarse al frente de un partido político con el único objetivo de manejar de modo descarado para su propio beneficio los fondos públicos que son puestos a su cargo.
Si no lo sabían Abinader y Vinicito, estaban sentados al lado de un individuo que en los últimos 4 años manejó 18 millones de pesos mensuales en los años no electorales y 450 millones el año 2016, solo contando los fondos entregados por el estado dominicano a través de la Junta Central Electoral, lo que suma 1,200 millones de pesos ¨mal contados¨.
Y no existe en el país en este momento, un solo local del Partido Reformista que no haya sido construido por Joaquín Balaguer, no hay una sola escuela de cuadros políticos abierta, la estructura partidaria es una farsa y el último proceso de reorganización se realizó en el año 1993, es decir, todo ese dinero público se ha esfumado con la complicidad de quienes tienen del deber de velar por el buen uso de los fondos públicos.
Esa montaña de dinero de los bolsillos de los contribuyentes dominicanos, ni siquiera fue usada en una campaña electoral inexistente, ya que como fenicio al fin, no tuvo le decencia de entregarlo a los candidatos del partido que fueron en una boleta prestada, estos tuvieron que rascarse sus propios bolsillos mientras el «Gallero Tramposo» hacía lo que le daba la gana con los fondos puestos a su cargo.
Para muestra basta un botón, solo hay que preguntar a quien ganó la candidatura de mayor jerarquía por el reformismo en las pasadas elecciones, el único Senador es de San Pedro de Macorís, cuánto dinero recibió para su campaña, de esos 450 millones que entregó la JCE, y la forma en que distribuyeron los fondos en su provincia para los candidatos a diputados, alcaldes y ediles, a ver si se entiende el porque a la reunión de que hablamos no fue la dirigencia tradicional del reformismo.
Nos encantó ver a los «moralistas» del país, a los «puros e inmaculados» que marchan los domingos vestidos de verde y con las caras compungidas, participar en un acto que encabezaba el mismo personaje que todos sabemos se ha convertido en el sepulturero de un partido que por supuesto merecía mejor suerte y quedar en otras manos.
Pero más temprano que tarde aparecerá de algún lado quien con un látigo en las manos, eche abajo las mesas de los cambistas de sueños por pesadillas, derribe los muros de la impunidad partidaria, rompa el maridaje de acciones ocultas entre funcionarios electorales y directivos de partidos, terminando para siempre el desvío descarado de los fondos públicos de un grupo de personas amparados bajo un manto de identidad partidaria inexistente.
Por lo menos estamos seguros que las reuniones de aposento, los acuerdos ocultos y las ambiciones desbordadas por el ego de tantos, terminarán en el suelo y el olvido cuando los echen del templo que construyó Balaguer para la supervivencia del partido que fundó en 1964, el cual han convertido en una ¨cueva de ladrones¨.
