Por Humberto Salazar
El anuncio en el día de ayer por parte de la Oficina Nacional de Meteorología, de que en los próximos dos a tres meses tendremos en nuestro territorio temperaturas por debajo de lo que es usual en nuestra región, nos debe alertar acerca de las enfermedades asociadas a la humedad y el frío.
Se habla incluso de que deberíamos prepararnos a tener temperaturas por debajo de los 10 grados en las grandes ciudades y en las zonas altas de la Cordillera Central, los termómetros podrían alcanzar cifras por debajo de los 0 grados, lo que definitivamente no es usual en la región del mundo donde nos encontramos.
Es usual que cuando bajan las temperaturas se activen las alertas para la aparición de enfermedades respiratorias, como estados gripales, bronquitis, asma, neumonía.
Además, hay que tener especial cuidado en niños y adultos mayores por la presencia del virus de la influenza, que generalmente viaja con los enfermos que se desplazan en esta época del año y por la gran cantidad de personas que se aglomeran en centros comerciales hay mucha posibilidad de contagio.
El porque somos mas propensos a desarrollar infecciones con los cambios de temperatura, tiene que ver con los mecanismos normales que poseemos para defendernos de los virus y bacterias con los que continuamente tenemos contacto.
Cuando respiramos hacemos ingresar por nuestra nariz agentes que nos podrían infectar, sin embargo, quedan atrapados por una capa superficial de células que cubren nuestras fosas nasales y al final son destruidas al llegar en algún momento a nuestro estomago.
Al haber un ambiente de bajas temperaturas y humedad, este mecanismo deja de funcionar y entonces nos hacemos mas sensibles a los virus que nos atacan y estos pueden producir las enfermedades respiratorias típicas de esta época del año.
Además el cuerpo humano esta programado para funcionar con una temperatura corporal ideal de 36.5 grados centígrados, un cambio brusco provoca la disminución de los mecanismos de defensa que poseemos, lo que nos hará que las bacterias o virus que estén dentro de nuestro cuerpo se activen y desarrollen una enfermedad respiratoria que en situaciones normales estaría controlada.
Existen medidas que van a disminuir la posibilidad de contagio en la población en general, debiendo tener cuidado de tomar medidas especiales en poblaciones vulnerables como son, las embarazadas, niños menores de 2 años y los adultos mayores, ya que estos últimos tendrán el peligro de complicaciones mas graves que las de un simple resfriado o catarro común.
En nuestro país, desde principios de este mes de noviembre, el Ministerio de Salud Pública hizo un llamado a las embarazadas, a que cuando asistan a sus chequeos pidan ser inmunizadas con las vacunas de la gripe H1N1 y de la influenza, la que será aplicada en los puestos de vacunación ubicados en las maternidades del país.
Además se están aplicando, en los principales hospitales del país, las vacunas para los niños desde los 6 meses a los 2 años y los adultos mayores de mas de 65 años de edad, que en su conjunto es la población mas vulnerable y con posibilidad de desarrollar un cuadro complicado de infección respiratoria.
Para la población en general, ante los cambios de temperatura que estamos registrando, que podrían agravarse si acierta en pronóstico de la ONAMET para los próximos meses, las recomendaciones generales son las siguientes.
Lavarnos las manos con frecuencia, evitar los ambientes cerrados y con gran afluencia de público, en caso de epidemia de gripe usar mascarillas, respirar siempre por la nariz, usar pañuelos y evitar estornudar frente a otras personas con la boca descubierta, en caso de caída brusca de la temperatura usar una bufanda para mantener el calor en la garganta y vías respiratorias superiores.
También debemos usar abrigos para que el cuerpo se mantenga funcionando en su temperatura ideal, lo que impedirá una caída de nuestras defensas; debemos airear nuestras habitaciones por lo menos una vez al día y evitar en lo que se pueda visitar lugares de alta exposición de virus y bacterias como son las clínicas y hospitales.
En los países de clima frío, que no es nuestro caso, en la época de bajas temperaturas aumentan las muertes por crisis asmáticas agudas, neumonías y algunos tipos de bronquitis graves, esto afecta a la población mas vulnerable, solo esperamos que las temperaturas no disminuyan tanto que también este problema se convierta en un serio reto para la salud de nuestra población.
